Recuerdos de Cecilia en el aniversario de su muerte.
Esta joven cantautora nació en Madrid, en el Palacio del Pardo el 11 de octubre de 1948.
Hija de diplomático Español vivió en diversos países como Inglaterra, EE. UU., Portugal, Jordania. Curiosamente aprendió a hablar en inglés antes que en castellano. Por ello sus primeras letras fueron tanto en inglés como en español.
Se educó con una monja americana que la animaba a tocar la guitarra y a cantar en todas las fiestas de fin de curso. Ya de regreso a España estudió Derecho, pero decidió dedicarse en serio a la música y a componer sus propias letras, que contenían una calidad poética y literaria notable, algo que era poco habitual en su tiempo.
Era considerada en su época algo rebelde y feminista, pero sus canciones escondían un perfil profundamente religioso.
Sus composiciones so de lo más variopinto desde canciones protesta hasta nostalgia de España (Mi querida España).
En 1975, Televisión Española decidió que representara a España en el festival de la “OTI”, y la artista lo aceptó a regañadientes, puesto que no le gustaban los festivales representando la canción "Amor de medianoche", compuesta por ella misma y por Juan Carlos Calderón.
Publicó en vida tres discos. Cada uno de ellos escondía sus misteriosas letras.
Lo cierto es que Cecilia en las letras de sus canciones fue narrando su propia vida. Algo que resulta curioso son sus recuerdos de felicidad de la infancia en su canción “cuando yo era pequeña”, pero en esa misma canción decía, “ahora que será de mí”.
Nadie pudo relatar su vida de forma tan clara.
Todos os preguntareis el porqué recuerdo hoy a esta cantautora.
Por algo simple, porque casi nadie recordará la madrugada del 2 de Agosto de 1976 cuando volvía de un concierto de Vigo (sala Olympia) y concretamente en “Colinas de transmontes” cerca de Benavente algo que había compuesto se hizo realidad, los cipreses negros se comieron sus sueños.
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