Salud, dinero y amor…
Primero empezamos con problemas económicos en los cuales llevamos inmersos desde el pasado año. Es cierto que a pesar de las numerosas quejas de la sociedad debido a los problemas económicos siguen siendo muchos los que están subidos en el carro del consumo y en un sentido virtual navegan bajo mi opinión por océanos que no conducen a islas maravillosas llenas de tesoros escondidos sino más bien puede ser un falso reflejo fruto de sus alucinaciones visuales. No creo sinceramente que de este océano vayan a salir muchos barcos a flote. Después de este triste fenómeno aparece el fantasma del virus desconocido que también proviene de otro continente y parece no tener problemas en expandirse por el mundo sin encontrar muchas barreras. De dicho virus poco conocemos y de momento podemos estar tranquilos, porque parece mostrarse ser más virulento en su lugar de origen y aunque siempre es bueno tomar las precauciones necesarias, ya sabemos que los virus son unos organismos caprichosos y lo que hoy considero una alarma poco justificada quizás el problema radique más en el futuro comportamiento de estos pequeños monstruos que sufren mutaciones y enseñan al ser humano lo vulnerable que puede mostrarse ante seres tan diminutos. Lo del amor ya es una causa perdida en nuestra deshumanizada sociedad.
Famosa es la frase de “tres cosas hay en la vida, salud, dinero y amor; el que tenga esas tres cosas, que le dé gracias a Dios”.
En fin, hoy en día dicha frase parece estar pasando por complicados momentos y siempre bajo mi modesta opinión, claro está.
Primero empezamos con problemas económicos en los cuales llevamos inmersos desde el pasado año. Es cierto que a pesar de las numerosas quejas de la sociedad debido a los problemas económicos siguen siendo muchos los que están subidos en el carro del consumo y en un sentido virtual navegan bajo mi opinión por océanos que no conducen a islas maravillosas llenas de tesoros escondidos sino más bien puede ser un falso reflejo fruto de sus alucinaciones visuales. No creo sinceramente que de este océano vayan a salir muchos barcos a flote. Después de este triste fenómeno aparece el fantasma del virus desconocido que también proviene de otro continente y parece no tener problemas en expandirse por el mundo sin encontrar muchas barreras. De dicho virus poco conocemos y de momento podemos estar tranquilos, porque parece mostrarse ser más virulento en su lugar de origen y aunque siempre es bueno tomar las precauciones necesarias, ya sabemos que los virus son unos organismos caprichosos y lo que hoy considero una alarma poco justificada quizás el problema radique más en el futuro comportamiento de estos pequeños monstruos que sufren mutaciones y enseñan al ser humano lo vulnerable que puede mostrarse ante seres tan diminutos. Lo del amor ya es una causa perdida en nuestra deshumanizada sociedad.
Famosa es la frase de “tres cosas hay en la vida, salud, dinero y amor; el que tenga esas tres cosas, que le dé gracias a Dios”.
En fin, hoy en día dicha frase parece estar pasando por complicados momentos y siempre bajo mi modesta opinión, claro está.
No hay comentarios:
Publicar un comentario